Este es una duda que nos planteamos bastante hoy en día debido a la situación actual. Y sinceramente pienso que mi opinión es la que tenemos la mayoría de los adolescentes.
Como es evidente, una clase online no es lo mismo que una presencial; en una clase online, el ambiente es distinto, estás en tu casa, por lo que puedes distraerte mucho más, tenemos a mano varios dispositivos que nos hacen distraernos. Prácticamente no tienes la mentalidad y seriedad de estar en clase, y no te preocupa que el profesor te vea o no que estés trabajando. A parte, hay algunos inconvenientes tecnológicos, hay veces que a algún alumno no le va bien la conexión, o incluso la de el propio instituto, y esto hace que el grupo que está telemáticamente vaya con más retraso y el profe en vez de avanzar en la siguiente clase algo nuevo, tenga que repetir de nuevo la ya dada, perdiendo así tiempo y saliendo perjudicados los alumnos que estaban online al tener que dar algún apartado de un tema más deprisa de lo previsto.
Otra cuestión, que las hace ser distintas, es que la relación entre el profesor y los alumnos no tiene ningún punto de comparación. Por la clase presencial, si tienes alguna cuestión que preguntar el profe, éste no es necesario que pare la clase para explicártela, puede simplemente acercarse hasta tu sitio y explicártelo, sin embargo, en la clase online, si alguien de los que están trabajando en casa tiene alguna duda, el docente tiene que parar la clase para que el alumno pregunte la duda, y entre unas dudas y otras, finalmente se pierde tiempo de clase. Pero también, si se da la ocasión de que el profesor tenga que parar su clase, si alguien está presencial, el trato es mejor en cuanto a atender con más atención y tanto como al alumno como al profesor se nos hace más fácil escuchar y explicarnos.
En segundo lugar, ¿se aprende lo mismo?, bueno como es lógico, y como ya he explicado anteriormente, el ambiente no es el mismo, estás más pendiente de lo que pase en tu casa o incluso más pendiente de algún dispositivo eléctrico, que de lo que está pasando en clase. Esto hace que las cosas que explique el profesor en clase y tú, por cualquier cosa no hayas estado atento te pierdes, decides dejar de prestar atención, y a lo mejor, prefieres estudiar otra asignatura o decidir hacer otra cosa que no sea atender a ésta. En clase presencial quieras o no, estás mucho más concentrado en aprender y en coger todos los apuntes posibles; sin embargo en casa, estás más disperso al tener muchas más cosas que te distraen.
Por lo que mi conclusión, es que una clase presencial es mucho más cómoda y más práctica que una telemática y aprendes mucho más porque estás atento y concentrado en ella.
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